sábado, abril 29, 2017

Análisis: Insuficientes chispazos de fútbol

Por contradictorio que suene, la salida de su mejor delantero provocó el despertar ofensivo de Emelec. Sin embargo, los diez minutos de buen fútbol que el 'Bombillo' mostró, luego de la sustitución de Marlon De Jesús, no alcanzaron para asegurar los tres puntos ante River Plate y el 1-2 con el que cayó anoche en el estadio Capwell hipoteca su futuro en el Grupo 3 de la Copa Libertadores.

En los papeles, el conjunto argentino llegaba como favorito y en la cancha lo confirmó, mostrando la jerarquía que los grandes tienen para sobreponerse a la adversidad.



Antes de cumplirse el minuto dos, estaba abajo en el marcador -gracias al tanto de Ayrton Preciado- pero, lejos de descontrolarse, sometió al rival y con goles de Jorge Moreira y Lucas Alario se consolidó como líder absoluto de su llave, dejando al vicecampeón ecuatoriano en la tercera posición y seriamente comprometido, porque en la víspera el Deportivo Independiente Medellín había vencido 1-2 de visitante al Melgar de Perú, el más débil del Grupo, en el mismo estadio donde Emelec fue doblegado.

De entrada, el director técnico Alfredo Arias apostó a la fuerza de Marlon De Jesús, quien complicó a los zagueros argentinos, mientras en la zona de volantes Pedro Quiñónez, Osvaldo Lastra y Fernando Gaibor sostenían una guerra sin cuartel contra los 'gauchos'.

Ya en la segunda etapa, y con el marcador igualado, el estratega uruguayo decidió cambiar el repertorio, jugando sus cartas a la velocidad de Bruno Vides, quien contó con dos claras opciones para desequilibrar la balanza, pero falló ante el golero Augusto Batalla.

El 10 de mayo Emelec devolverá la visita a River y si no gana comenzará a despedirse de la Copa Libertadores.


Fuente: Expreso