El culebrón más grande de los últimos tiempos en el balompié ecuatoriano, llamado Marcos Mondaini al fin terminó. El delantero argentino confirmó que definitivamente ya no vendrá al país para enfundarse la casaca del Club Sport Emelec sino que se queda en Boca Juniors.
Mondaini, en contacto telefónico con la estación televisiva Gamavisión, se mostró sorprendido por lo que aconteció en las últimas horas con su futuro, ya que “anoche ya estaba prácticamente en Guayaquil y hace tres horas me bajaron del avión”, dijo.

“A último momento me dicen que… parece que no arreglaron con Boca el préstamo, parece que no me quieren mandar, la verdad realmente es que yo no entiendo nada, anoche ya estaba prácticamente en Guayaquil y hace tres horas me bajaron del avión”, señaló.

Según explicó el futbolista, tuvo un diálogo con un importante dirigente del club dueño de su pase Boca Juniors, quien le comunicó que la decisión definitiva era de hacerlo ganar experiencia pero en filas “Xeneizes” y no en otro equipo, por más interesante que sea la oferta.

“No, no, no, no me quieren negociar, no porque una oferta más importante la rechazó también, yo acabo de hablar ahora con un dirigente importante y la idea es que sume experiencia acá, que sume minutos para pensar en un futuro acá”, reveló.

El mejor jugador de la temporada 2006 del Campeonato Ecuatoriano dejó en claro su incomodidad por el “manoseo” que tuvo el tema, reiterando que eso no le permitía su tranquilidad ni la de su familia.

“Se manoseo mucho este tema, tanto yo como a mi familia. Ayer justamente hablé con mi vieja y le dije que me iba para Guayaquil y la noticia la verdad que cambia de un día para otro y a mi vieja la verdad no le hace bien esto, hoy la tengo que llamar o no a decirle que me quedo acá”, manifestó.

“La verdad que por un lado estoy mucho más tranquilo porque mi cabeza no daba más, que me iba, que me quedaba, que salía para otro lado, la verdad que estaba un poquito intranquilo, bueno de cierta manera esto tranquiliza porque sé que mi mente ahora tiene que estar acá, tengo que trabajar acá para ganarme la confianza del técnico y trabajar para ganarme un lugar”, continuó el “Gaucho”.

Por otro lado, el futbolista expresó su agradecimiento a la institución “Millonaria”, la cual aseguró que representa mucho para él, ya que fue la que lo dio a conocer en el plano internacional y la que hizo hasta lo imposible para tenerlo en sus filas, llegando a alcanzar un acuerdo con Boca para el préstamo por seis meses.

“Emelec para mi representa mucho y bueno, ya había decidido, había puesto todo las ganas para ir a aportar mi granito de arena y bueno no salió”, señaló.
Añadió que “por lo que me dijeron hoy, por lo que hablé hoy parece todo cerrado” respecto a una leve esperanza de la hinchada “Azul”, de quien se refirió en los mejores términos.

“La verdad los mejores recuerdos. Sinceramente me traje uno de los mejores recuerdos de mi vida de la hinchada de Emelec, creo que el cariño que me brindó y lo que me estuvieron esperando hasta este momento creo que no tiene precio, eso no lo compras ni con el oro,
“Solamente voy a estar eternamente agradecido a toda la gente que me llamaba, que se preocupaba que me escribía, que estaba pendiente de Marcos Mondaini, de que iba hacer que a uno, le hace abrir los ojos y me pone muy contento y a la vez la verdad que muy pero muy agradecido a toda la hinchada”, puntualizó.

De esa manera llega su final la “novela” del habilidoso ariete “Albiceleste”, que alborotó el balompié ecuatoriano con sus gambetas y diabluras en el área contraria.