Para afrontar la Copa Libertadores de América y el Campeonato Nacional, Emelec se ha reforzado con seis delanteros extranjeros, que se convertirían en siete con la llegada de Marcos Mondaini, pero en el fútbol no ganan los partidos los equipos que más delanteros pone en la cancha, sino el que tiene un equilibrio en todas sus líneas.

Hasta el club eléctrico han arribado sólo hombres de ataque como refuerzos, se dice que unos actuarán en la Libertadores y otros en el torneo local, pero hay un desbalance con relación a los otros sectores, pues uno de los más vulnerables es la defensa, pero al parecer para los azules el éxito sólo radica en la delantera.

Los millonarios tampoco tienen una buena línea de volantes ni de corte ni de armado y hasta ahora no se ha explicado por qué han llegado tantos atacantes y no se buscó la forma de equilibrar la zaga y la línea de volantes.

Es ilógico creer que el fuerte del bombillo estará adelante y que eso le bastará para afrontar sus torneos.

En la Copa tiene rivales difíciles y que tornan muy difícil su panorama en el torneo y por lo visto ante Liga Deportiva Universitaria de Portoviejo, la defensa pasa más de un problema con hombres rápidos y desequilibrantes.

Los equipos empiezan a armarse desde atrás, pues el éxito también depende de qué tan efectiva es la última línea, de qué sirve que se marquen muchos goles, si a su vez recibirá igual número o más.

Hasta el momento no se ha explicado si fue por pedido del técnico Carlos Torres Garcés es que han llegado tantos elementos en una sola posición o los que arribaron provenientes de Boca Juniors lo hicieron porque su club de origen sólo cedía delanteros.

Si el año pasado Emelec era un equipo efectivo y rápido desde la media cancha hacia delante, la antítesis estaba en el sector defensivo, el que produjo errores que le costaron derrotas muy caras.

Cómo determinará el estratega quién jugará qué torneo y mientras decide aquello tendrá que pensar cómo resolver sus problemas de una zaga vulnerable, inconsistente y propensa siempre al error.

Si se hace un balance, Emelec no es un equipo equilibrado, la cuota de extranjeros se ha centrado sólo en la búsqueda desesperada de encontrar otros Luis Miguel Escalada y Marcos Mondaini. Con su experiencia Carlos Torres Garcés sabe que no hay mejor ataque que una buena defensa.