Emelec sigue sumido en el último lugar de la tabla de posiciones donde apenas ha sumado seis puntos cuando se han jugado siete fechas del Campeonato Ecuatoriano de Fútbol. El domingo empató con Macará.

El cuadro azul está sin brújula, sin una guía en el mediocampo y la zona ofensiva carece de contundencia, de gol. A estas alturas en la temporada pasada la dupla que la hinchada azul debe estar extrañando y mucho, Marcos Mondaini y Luis Miguel Escalada, ya comenzaban a hacer estragos en los arcos rivales. Sin embargo, hasta el momento la delantera millonaria suma tres puntos (Jorge Ladines, dos tantos e Israel Rodríguez, uno), que en realidad es poco.

Como solución trajeron al colombiano Wilson Segura, pero el artillero cafetero aún tiene la pólvora mojada, porque no ha convertido ningún tanto.

La situación de Emelec se torna preocupante porque no tiene jugadores de dónde escoger y esto se agrava por cuanto no sólo debe actuar casa adentro sino a nivel internacional, en Copa Libertadores, donde tampoco no le está nada bien.Los dirigentes del cuadro eléctrico desde el comienzo sabían que con ese plantel no iban a ningún lado y ellos asumieron el riesgo, porque hubiesen hecho el esfuerzo y pudieron haber retenido a algunos de los elementos que tenían.

Hasta el momento no son del agrado de la afición millonaria que ya comienza a preocuparse y a culpar al técnico a los jugadores foráneos y a dirigentes. En todo caso, Emelec debe hacer los correctivos correspondientes y rápido porque si no su futuro no es nada halagador.