Emelec se juega hoy la vida en la Copa Libertadores. Una derrota lo dejará fuera de la competición. Por ello, Carlos Torres Garcés, entrenador azul, ha tomado todas las precauciones del caso para evitar una caída.

La tarea no es imposible. El Bombillo suma tres puntos en el Grupo 4 tras haber vencido al mismo Nacional, en el Capwell.

Así que repetir la dosis en Montevideo -como lo hizo el Olmedo de Riobamba en 2005 (1-2)- pondrá a Emelec en carrera para llegar a la segunda fase.

Ambos equipos con un partido menos jugado, disponen de una inmejorable oportunidad de afianzarse en el segundo lugar de la llave, que lidera el argentino Vélez Sarsfield con ocho unidades, seguido de Nacional e Internacional de Brasil con cuatro y Emelec con tres.

El traspié del defensor del título, que resignó la semana pasada en Porto Alegre dos unidades ante Vélez, hizo renacer las chances de uruguayos y ecuatorianos que buscan en el certamen continental, borrar la pésima imagen que exhiben en las ligas locales, sumergidos en las últimas colocaciones.

Los ‘tricolores’ abordarán el compromiso con las bajas de su arquero Alexis Viera, que sufrió un esguince de rodilla y el defensa Diego Jaume, expulsado en último juego.

Sus lugares serán ocupados por los juveniles Fernando Muslera y Alejandro Rodríguez, dando paso a una línea de tres en defensa con Diego Godín como zaguero central.

El guardameta de 20 años, nacido en Buenos Aires y vigía del arco celeste en Sudamericanos Sub 17 y Sub 20, calificó el cotejo como una “revancha” y advirtió que “es el momento de reivindicarnos de una falsa actuación que nos llevó a retornar de Ecuador con las manos vacías”.

Emelec tendrá tres ausencias en su última línea en virtud de las expulsiones de los defensas Marco Quiñónez y Geovanny Caicedo, y la lesión de Luis Zambrano, quienes serán sustituidos por Silvano Estacio, Facundo Corozo y Michael Arroyo. AFP