lunes, diciembre 31, 2007
‘El dirigente de hoy perdió peso’. Entrevista de El Comercio a Eduardo 'Ñato' García
Publicado a las 8:08:00 p. m. por webmaster
Tweet
Eduardo ‘Ñato’ García explica qué prometió la nueva dirigencia de Emelec y qué se cumplirá.
Existe inconformidad en la hinchada azul, pues la nueva dirigencia prometió refuerzos y no ha cumplido.
La Directiva no ha prometido nada, salvo traer al DT Jorge Da Silva, quien no aceptó venir porque quería venir con su preparador físico y nosotros ya teníamos uno. De jugadores jamás hemos hablado. Lo de (Marcos) Mondaini siempre estuvo ahí. De allí, Emelec ha contratado a 10 jugadores nacionales y tres extranjeros, con los cuales estamos felices.
Pero se anunció la llegada de los hermanos Zura...
Uno de los hermanos (Rommel) está en Emelec. El otro (Edmundo) llegó a Barcelona solamente para jugar seis meses. Nosotros no queremos contratar jugadores bajo esas condiciones.
Se ha tejido una especie de novela alrededor del fichaje de Daniel ‘Trapito’ Vega.
La novela la hizo la prensa. Nosotros decimos la verdad: llegamos a un acuerdo con el pase y con el contrato del jugador, pero había una dificultad. Vega tenía que salir de Platense, pero su contrato expiraba en junio del próximo año. Sabíamos que eso iba a llevar un tiempo. El jugador sale de Platense y ahí será de Emelec.
¿Siente que los reclamos de la hinchada puedan afectar a su credibilidad?
En lo absoluto. Me hubiera sido fácil traer jugadores o un técnico de renombre. Pero trajimos gente que encajaba con el perfil que necesita hoy el club.
¿Juan Urquiza era la mejor opción para dirigir a Emelec?
Él tiene una gran personalidad, no se le escapa ningún detalle, maneja psicología y además es optimista. Hicimos una estadística: Urquiza tiene un 70% de efectividad en su carrera.
Usted fue campeón como jugador, técnico y dirigente. ¿Siente que el fútbol de hoy le permitirá repetir su éxito?
No lo dudo. Aunque me he topado con un mundo diferente.
¿Qué ha cambiado?
Ahora no hay un solo jugador que pertenezca al club, todos son de empresarios. Ellos especulan con los precios y no hay regulaciones. El empresario le quita mucho al jugador y este no piensa en defender al club. Además, el futbolista termina respetando más al empresario que al técnico.
Entonces, ¿ha perdido peso el dirigente moderno?
Lo que sucede es que como a los jugadores se les terminan los contratos y quedan libres automáticamente, el dirigente de hoy tiene que ser muy ‘vivo’ para que no se le vaya el patrimonio del club.
¿Cuánto ayuda a un dirigente haber sido futbolista?
Es clave a la hora de solucionar problemas. El dirigente de oficina no tiene esas historias de camerinos, no sabe de esa presión del rival, del calor, de la altura...
¿Qué características debe reunir el dirigente de hoy?
Saber de fútbol, tener experiencia, dar firmeza y otorgar cariño y amor a los jugadores. Pero, principalmente, hacer que la plantilla se sienta protegida por una mano firme, que no tiemble.
La profesión de futbolista es corta y son pocos los que llegan a administrar su dinero. ¿Qué opciones tiene el jugador fuera de la cancha?
Hoy, al futbolista se le abren todas las puertas. Él es la única empresa que trabaja de cero para valer millones a fin de año. El jugador que no aproveche un segundo en la cancha es un tarado.
Usted predica el Evangelio. ¿Compartirá la palabra de Dios con los jugadores?
Indudablemente. Y por ejemplo, la Palabra es la que puede transformar a Armando Paredes. Vamos a recuperar a un ser humano y a un jugador talentoso.
¿Ve a los jugadores predispuestos a oír la Palabra?
¿Quién no necesita una palabra de aliento?
¿Y con ello se piensa controlar la indisciplina?
También con un reglamento que implica un cuidado en la vida privada del jugador. Vamos a estar atrás de los futbolistas, no para vigiliarlos sino para protegerlos.