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viernes, enero 23, 2009
Emelec pintó de azul la 'Noche Colorada'
Publicado a las 10:35:00 p. m. por webmaster
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Con un solitario gol, tras una fenomenal maniobra del artillero eléctrico Franco Mendoza, el Club Sport Emelec superó por la cuenta mínima a un Deportivo Cuenca que nunca se entendió sobre el gramado del Serrano Aguilar. Los azules le aguaron la fiesta al equipo morlaco.
La Noche Colorada inició con ambos equipos con clara vocación ofensiva y con la hinchada del Expreso Austral recordándole a sus ex jugadores su inconformidad por cambiar de camiseta, siendo Marcelo Fleitas uno de los más silbados e injuriados. Ya en cancha, los eléctricos eran más punzantes.
En el primer minuto de juego, tras una gran arrancada del “Peque” Torales, Franco Mendoza quedaba habilitado y con un zurdazo daba el primer aviso a la portería de Morán. Deportivo Cuenca intentaba llegar a la portería de Elizaga pero la imprecisión predominó en los pases entre la línea de volantes y la delantera morlaca.
Mientras que Emelec mostraba un fútbol más coordinado y elaborado, teniendo en Bryan Rodríguez a su director de orquesta y que a base de regates, desequilibró a la zaga de los locales. La notable superioridad en volumen de juego que poseían los dirigidos por Gabriel Perrone sobre los cuencanos, les permitiría adelantarse en el marcador al minuto 17.
Tras una serie de pases consecutivos, Mendoza la recibía al borde de la media circunferencia, con un exquisito enganche burlaba a los dos zagueros centrales (Orrego y Quiñónez) del Cuenca y definía a placer con su derecha, mandándola a guardar con un tiro raso sobre la derecha de un Carlos Morán que observaba impotente cómo se colaba el esférico en su portería.
Cuatro minutos más tarde, con ímpetu y ganas, más que con precisión y buen toque, el Cuenca tendría una oportunidad inmejorable para empatar. El capitán de los morlacos, Giancarlo Ramos, tras un rebote de la zaga eléctrica, quedaba solo frente al capitán azul, Marcelo Elizaga, al borde del área chica. Ramos la mandó hacia la pista atlética del Serrano Aguilar.
La esperanza de gol del equipo morlaco, el brasilero Rodrigo Texeira quedó en deuda con la afición que asistió al Serrano Aguilar. El ex Barcelona se mostró displicente y muy impreciso en cada una de sus intervenciones denotando una preocupante falta de ritmo futbolístico.
En los últimos quince minutos del primer tiempo el partido se embarró, llenándose de bruscas faltas por ambos bandos, y con José Carpio, juez central del encuentro mostrando su tarjeta amarilla en varias ocasiones. Marlon Moreno se salvaba de la expulsión (recibiendo tan solo una amarilla), tras un planchazo a dos piernas sobre la integridad de B. Rodríguez, iniciando el juego brusco en el partido.
Achilier, Quiroz y Rodriguez, en el cuadro emelecista, y Texeira, en los locales, se marchaban a los vestuarios con una tarjeta amarilla sobre sus hombros, los tres últimos por discrepar con las decisiones de Carpio, mientras que Gabriel Achilier fue amonestado por una falta sobre el brasilero. Uno a cero arriba Emelec, se iban al descanso.
Para el segundo tiempo ambos equipos realizaron muchísimos cambios. Guillermo Duró situó a un equipo completamente distinto, mientras que Perrone dejó a Achilier y a Nazareno en cancha para la etapa complementaria. El nuevo equipo morlaco evidenciaba su entusiasmo por conseguir el empate y al 53’, Edison Preciado probaba los reflejos del recién ingresado Javier Klimowicz, que desviaba su remate con su mano derecha enviando el esférico por la raya final.
El segundo tiempo careció de buen fútbol y fue el anti fútbol el que predominó. Klimo recibía una amarilla diez minutos más tarde por discrepar también con el criterio de Carpio. El Expreso Austral sentía la presión de su hinchada y se volcaba al ataque, pero nuevamente los morlacos fueron víctimas de la imprecisión y el apresuramiento al momento de tocar la pelota.
John García, que ingresó para la segunda etapa, le brindó tranquilidad y buen toque a los cuencanos, liderando los escasos ataques que generaban los camiseta colorada. Sin embargo, al 75’ tendría que ser substituído por Diego Solís a causa de una lesión de la que se desconoce su gravedad. Su salida repercutiría de manera inmediata en el equipo cuencano, que se veía incapaz de generar situaciones de riesgo en la portería del ex Deportivo Cuenca. Carpio señalaba el final del encuentro, en el que Emelec fue el animador de la fiesta colorada.
La Noche Colorada inició con ambos equipos con clara vocación ofensiva y con la hinchada del Expreso Austral recordándole a sus ex jugadores su inconformidad por cambiar de camiseta, siendo Marcelo Fleitas uno de los más silbados e injuriados. Ya en cancha, los eléctricos eran más punzantes.
En el primer minuto de juego, tras una gran arrancada del “Peque” Torales, Franco Mendoza quedaba habilitado y con un zurdazo daba el primer aviso a la portería de Morán. Deportivo Cuenca intentaba llegar a la portería de Elizaga pero la imprecisión predominó en los pases entre la línea de volantes y la delantera morlaca.
Mientras que Emelec mostraba un fútbol más coordinado y elaborado, teniendo en Bryan Rodríguez a su director de orquesta y que a base de regates, desequilibró a la zaga de los locales. La notable superioridad en volumen de juego que poseían los dirigidos por Gabriel Perrone sobre los cuencanos, les permitiría adelantarse en el marcador al minuto 17.
Tras una serie de pases consecutivos, Mendoza la recibía al borde de la media circunferencia, con un exquisito enganche burlaba a los dos zagueros centrales (Orrego y Quiñónez) del Cuenca y definía a placer con su derecha, mandándola a guardar con un tiro raso sobre la derecha de un Carlos Morán que observaba impotente cómo se colaba el esférico en su portería.
Cuatro minutos más tarde, con ímpetu y ganas, más que con precisión y buen toque, el Cuenca tendría una oportunidad inmejorable para empatar. El capitán de los morlacos, Giancarlo Ramos, tras un rebote de la zaga eléctrica, quedaba solo frente al capitán azul, Marcelo Elizaga, al borde del área chica. Ramos la mandó hacia la pista atlética del Serrano Aguilar.
La esperanza de gol del equipo morlaco, el brasilero Rodrigo Texeira quedó en deuda con la afición que asistió al Serrano Aguilar. El ex Barcelona se mostró displicente y muy impreciso en cada una de sus intervenciones denotando una preocupante falta de ritmo futbolístico.
En los últimos quince minutos del primer tiempo el partido se embarró, llenándose de bruscas faltas por ambos bandos, y con José Carpio, juez central del encuentro mostrando su tarjeta amarilla en varias ocasiones. Marlon Moreno se salvaba de la expulsión (recibiendo tan solo una amarilla), tras un planchazo a dos piernas sobre la integridad de B. Rodríguez, iniciando el juego brusco en el partido.
Achilier, Quiroz y Rodriguez, en el cuadro emelecista, y Texeira, en los locales, se marchaban a los vestuarios con una tarjeta amarilla sobre sus hombros, los tres últimos por discrepar con las decisiones de Carpio, mientras que Gabriel Achilier fue amonestado por una falta sobre el brasilero. Uno a cero arriba Emelec, se iban al descanso.
Para el segundo tiempo ambos equipos realizaron muchísimos cambios. Guillermo Duró situó a un equipo completamente distinto, mientras que Perrone dejó a Achilier y a Nazareno en cancha para la etapa complementaria. El nuevo equipo morlaco evidenciaba su entusiasmo por conseguir el empate y al 53’, Edison Preciado probaba los reflejos del recién ingresado Javier Klimowicz, que desviaba su remate con su mano derecha enviando el esférico por la raya final.
El segundo tiempo careció de buen fútbol y fue el anti fútbol el que predominó. Klimo recibía una amarilla diez minutos más tarde por discrepar también con el criterio de Carpio. El Expreso Austral sentía la presión de su hinchada y se volcaba al ataque, pero nuevamente los morlacos fueron víctimas de la imprecisión y el apresuramiento al momento de tocar la pelota.
John García, que ingresó para la segunda etapa, le brindó tranquilidad y buen toque a los cuencanos, liderando los escasos ataques que generaban los camiseta colorada. Sin embargo, al 75’ tendría que ser substituído por Diego Solís a causa de una lesión de la que se desconoce su gravedad. Su salida repercutiría de manera inmediata en el equipo cuencano, que se veía incapaz de generar situaciones de riesgo en la portería del ex Deportivo Cuenca. Carpio señalaba el final del encuentro, en el que Emelec fue el animador de la fiesta colorada.
Fuente: FútbolEcuador
