Con una goleada en Santo Domingo, Emelec cosechó su primera victoria en el Torneo 2010. Aunque parezca increíble, el golero de los policiales, Edwin Villafuerte, tuvo complicidad en los 3 tantos azules.


La tarde de este domingo, Espoli recibió a Emelec en un Estadio Municipal de Santo Domingo que lució lleno, mayoritariamente de hinchas eléctricos. Familias enteras llegaron con camisetas y gorras del club. Sintiéndose como en casa más que el local, el 'Bombillo' terminó llevándose una contundente victoria por 3 a 0.

Como dueño de casa, “el Gallito” quiso tomar la iniciativa de las acciones, pero no lo lograba, ya que los azules también buscaban jugar; aunque ninguno de los dos llegaba con verdadero peligro. A los 18, los porteños dieron el primer susto de verdad con un tiro libre de David Quiroz que se fue apenas desviado, sin que nadie lograra desviarlo a las redes.

Desde el minuto 20 hasta el final del primer tiempo, los policiales ya lograron inclinar el campo a su favor y generaron más llegadas claras. A los 21, Marvin Cortes llegó por el costado derecho del área y sacó un centro-remate cruzado que se fue cerca del segundo palo, sin que Orlindo Ayoví lograra cerrar la pinza. Al minuto 36, Carlos Quillupangui se animó a probar desde larga distancia y sacó un remate que parecía que se iba a colar por un ángulo, pero Marcelo Elizaga le negó el gol con una espectacular volada. Después, a los 42, Cristian Penilla tuvo la más clara cuando estrelló un tiro en el vertical izquierdo.

Para la segunda parte, Emelec saltó con mayor ambición, se adueñó del esférico y logró capitalizar tres fallas del portero Villafuerte para llevarse la victoria por goleada. Primero, a los 58, en un disparo de Pedro Quiñónez, el portero policial dio un rebote al medio del área y David Quiroz llegó para tomar el rebote, pero le pegó remordido ante la presión de un zaguero; sin embargo, Hernán Peirone no se desatendió de la jugada y con una maniobra semiacrobática empujó el balón a las redes cuando parecía que Cristian Ojeda podía rechazar en la raya.

A los 64, llegó otro rebote de Villafuerte y el segundo gol millonario. Peirone sacó un potente tiro, el golero volvió a aflojar al medio y Joao Rojas llegó, a placer, para tomar el balón y enviarlo al fondo.

Finalmente, a los 76, el 'Ballet' escribió la goleada con la última ayuda del guardameta rival. En un tiro libre, el portero no se logró acomodar y David Quiroz lanzó un disparo que se fue a las redes junto a él. El portero no logró reaccionar a tiempo y se terminó quedando parado, ya que estaba yendo de viaje al costado izquierdo y el balón se le coló por el derecho.

El 'Gallito' quiso reaccionar, pero nunca tuvo arrestos ni ideas y Marcelo Elizaga pasó de vacaciones todo el segundo tiempo. Más bien, los guayaquileños estuvieron cerca de la cuarta en los descuentos. Peirone ganó la raya de fondo, sacó el pase de la muerte, pero Jaime Ayoví terminó rematando a cualquier parte menos al arco.