jueves, junio 21, 2012
Emelec llenó de alegría a pequeños pacientes
Publicado a las 9:08:00 p. m. por webmaster
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Raúl González y José Muñoz tienen algunas cosas en común. Son emelecistas, sueñan con ser futbolistas, son compañeros en una de las salas del hospital Francisco de Ycaza Bustamante y están seguros de que vencerán a las enfermedades que enfrentan.
José cumplió ayer nueve años y recibió el mejor de los regalos: conocer a los integrantes de Emelec. Algo similar sucedió con Raúl, quien el 13 de mayo cumplió doce años y lo celebró junto a los azules en el estadio Modelo Alberto Spencer, cuando los azules derrotaron 2-1 a Deportivo Cuenca.
Los pequeños hinchas formaron parte de un grupo de doce pacientes de las salas de nefrología y oncología de la citada casa asistencial, que ayer acudieron al polideportivo de Los Samanes, gracias a las gestiones realizadas por personeros de la Fundación Ser Libre.
José cumplió ayer nueve años y recibió el mejor de los regalos: conocer a los integrantes de Emelec. Algo similar sucedió con Raúl, quien el 13 de mayo cumplió doce años y lo celebró junto a los azules en el estadio Modelo Alberto Spencer, cuando los azules derrotaron 2-1 a Deportivo Cuenca.
Los pequeños hinchas formaron parte de un grupo de doce pacientes de las salas de nefrología y oncología de la citada casa asistencial, que ayer acudieron al polideportivo de Los Samanes, gracias a las gestiones realizadas por personeros de la Fundación Ser Libre.
Cuando llegó al fortín de los azules, José era el más ansioso. Vestía una camiseta y una gorra con los distintivos del club 'millonario'. Corría de un lado a otro, tratando de identificar a sus ídolos.
Raúl actuaba de una manera más cauta. Una mascarilla cubría parte de su rostro, era su protección ante cualquier agente externo que pusiera en peligro su salud. Su madre, Miriam Franco, explicó que por estos días el joven estudiante de la Academia Naval Almirante Illingworth estaba con las plaquetas bajas y necesitaba cuidado, aunque los médicos le sugirieron que realice sus actividades de manera normal.
"Él tiene un tumor cerebral. Ya cumplió los seis ciclos de quimioterapia y estaba algo decaído, pero cuando le dijeron que lo traerían a ver a los jugadores de Emelec se animó de inmediato. Es un gran estímulo para él y espero que le sirva para retomar sus estudios", indicó la señora.
Los minutos pasaban y los niños se comenzaban a impacientar. El coordinador de Emelec, Luis Idrovo, quien junto a Wladimir Quinteros se convirtió en el nexo entre el club y la fundación, dialogó con Marcelo Fleitas, que decidió hacer una pausa a su trabajo para atender a los visitantes.
El argentino Luciano Figueroa fue el primero en salir. Se fotografió con los chicos y repartió autógrafos. Cuando le tocó el turno a José, lo abrazó y le dijo que ayer también era el onomástico de su hija, Lola.
Camille Gamarra, una de las voluntarias de la fundación, dio la señal para que los pequeños ingresen a la cancha.
Polo Wila, Efrén Mera, Ronald Campos, Fernando Giménez, Wilmer Zumba y el preparador físico David Sánchez eran los más emocionados. Dialogaban con los invitados, hacían bromas con ellos y se tomaron fotos. Uno de ellos incluso solicitó información para poder colaborar con la institución benéfica.
Pasaron pocos minutos desde que el capitán Pedro Quiñónez se había retirado del lugar lesionado, pero eso no fue obstáculo para que los 'eléctricos' lleven un poco de alegría a esos seres que afrontan el partido más difícil de sus vidas.
Raúl actuaba de una manera más cauta. Una mascarilla cubría parte de su rostro, era su protección ante cualquier agente externo que pusiera en peligro su salud. Su madre, Miriam Franco, explicó que por estos días el joven estudiante de la Academia Naval Almirante Illingworth estaba con las plaquetas bajas y necesitaba cuidado, aunque los médicos le sugirieron que realice sus actividades de manera normal.
"Él tiene un tumor cerebral. Ya cumplió los seis ciclos de quimioterapia y estaba algo decaído, pero cuando le dijeron que lo traerían a ver a los jugadores de Emelec se animó de inmediato. Es un gran estímulo para él y espero que le sirva para retomar sus estudios", indicó la señora.
Los minutos pasaban y los niños se comenzaban a impacientar. El coordinador de Emelec, Luis Idrovo, quien junto a Wladimir Quinteros se convirtió en el nexo entre el club y la fundación, dialogó con Marcelo Fleitas, que decidió hacer una pausa a su trabajo para atender a los visitantes.
El argentino Luciano Figueroa fue el primero en salir. Se fotografió con los chicos y repartió autógrafos. Cuando le tocó el turno a José, lo abrazó y le dijo que ayer también era el onomástico de su hija, Lola.
Camille Gamarra, una de las voluntarias de la fundación, dio la señal para que los pequeños ingresen a la cancha.
Polo Wila, Efrén Mera, Ronald Campos, Fernando Giménez, Wilmer Zumba y el preparador físico David Sánchez eran los más emocionados. Dialogaban con los invitados, hacían bromas con ellos y se tomaron fotos. Uno de ellos incluso solicitó información para poder colaborar con la institución benéfica.
Pasaron pocos minutos desde que el capitán Pedro Quiñónez se había retirado del lugar lesionado, pero eso no fue obstáculo para que los 'eléctricos' lleven un poco de alegría a esos seres que afrontan el partido más difícil de sus vidas.
Fuente: Expreso