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sábado, noviembre 08, 2014

"El jugador número 12 de Emelec"

Publicado a las 8:31:00 p. m. por webmaster

Editorial de Juan Luis Fuenzalida. Publicado por Estadio.

Si bien es cierto Emelec no pudo avanzar más en la Copa Sudamericana, al terminar eliminado con Sao Paulo, pese a ganar 3-2, su hinchada merece un premio aparte.

Dos horas antes del partido convirtieron el estadio Capwell en una fiesta, con sus cánticos acompañados de tambores y trompetas. Pero eso no es todo...

Antes que se iniciara el partido, cuando el Sao Paulo salió a la cancha a calentar, el bullicio que provocó, acompañado de fuegos pirotécnicos, anticipaban que no sería fácil la clasificación para los brasileros.

Lo mismo aconteció cuando saltó Emelec a la cancha. Una lluvia de papeles picados y fuegos artificiales, como si se estuviesen celebrando las fiestas de fin de año, le dieron mucho colorido a la noche guayaquileña.


Los jugadores sintieron el respaldo y para ratificarlo a los 30 segundos Miller Bolaños anotaba el primer gol y abría las esperanzas de los azules.

Pero Sao Paulo apeló a su calidad y con dos llegadas se puso en ventaja con goles de Karlec y Ganso.

Emelec se fue al descanso, pero regresó motivado con dos variantes Mondaini y Gaibor, quienes reemplazaron a Herrera y Pedro Quiñónez.

Ambos jugadores le dieron más dinámica y volvieron a encender al monstruo de mil cabezas de la calle San Martín.


Fue así como en dos oportunidades el árbitro Oses sancionó dos penales que Miller Bolaños los cambió por gol.

Parecía que sería una noche inolvidable, pero los caprichosos verticales y horizontales impidieron que Giménez se llevara el homenaje de su hinchada, luego de su gran partido.

El tiempo fue pasando pero la hinchada azul nunca bajó los brazos y cuando terminó el cotejo despidió a sus jugadores con multitudinarios aplausos y con el clásico “Como no te voy a querer… como no te voy a querer… si eres para mi la vida por eso nunca te dejaré”.

Una fiesta incompleta pero sin lugar a dudas inolvidable por la calidad de partido que se vivió en la cancha del Capwell.



Comunidad azul



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