Hablar de Emelec es hablar de un grande de nuestro fútbol, pero que está viviendo horas negras. Su inminente eliminación de la liguilla no hace otra cosa que ratificar las pésimas campañas de los últimos cinco años.

Después del bicampeonato, vino la debacle. En la liguilla del 2003 se ubicó cuarto, a siete puntos del tercero; en el 2004 no clasificó a la liguilla; en el Apertura 2005 fue noveno entre 10 y no jugó los play-offs; en el Clausura tampoco clasificó a la liguilla. En el 2006, le sonó la lámpara con las contrataciones de Mondaini y Escalada y fue vicecampeón; y en el 2007, no clasificó a la liguilla. Este año repite la historia.

Este lustro es similar al período del 80 al 87 donde únicamente disputó la liguilla de 1984. Una de las razones para el fracaso es que desde el 2003 hasta la fecha han jugado 227 partidos, lo han dirigido 17 técnicos, los números dicen que un entrenador en Emelec dura 14 partidos.