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miércoles, febrero 09, 2011
Si, tu ídolo también era hincha de Emelec...
Publicado a las 8:32:00 p. m. por webmaster
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Hoy, que recordamos un aniversario más (en el 2011 son 33 años, pero no lo mencionaré mucho porque planeo republicar este post en años venideros) del día en el que Julio Jaramillo alcanzó la inmortalidad, lo más lógico sería publicar la biografía, con trayectoria artística incluída, del 'Ruiseñor de América'. Pero a estas alturas todo el mundo lo ha hecho ya. (De hecho, si en serio quieren una biografía concreta, interesante y muy emocional sobre él, les recomiendo este reportaje del programa "La Televisión").
Por mi parte, yo prefiero homenajear al gran 'JJ' de una manera diferente: contribuyendo a combatir la ignorancia de aquellos que afirman, muy sueltos de lengua, que Julio Jaramillo era hincha de barcecopia. ¡Tremenda calumnia!
Este ridículo mito urbano, que atenta contra el buen recuerdo que Ecuador tiene de él, seguramente fue originado en la poesía que el periodista guayaquileño Fernando Artieda (+) dedicó al 'Ruiseñor' tras su muerte. En ella, Artieda relata con emoción, picardía y un lenguaje muy propio del Guayaquil de siempre, la forma en la que la gente y la ciudad vivieron la muerte de JJ, y lo acompañaron en sus legendarios funerales.
Y es precisamente allí en donde surge la mala interpretación que induce al error a aquellos que, en lugar de investigar, prefieren repetir como loros lo que creen haber escuchado o entendido. A Artieda, recordado como hincha de farselona, seguramente no se le ocurrió nada mejor que decir al momento de narrar: "(...)un borrachito, con una botella de trago en la mano temblorosa, decía: 'ahora solo nos queda barcelona'(...)". Esta sencilla pero fictícia frase, mas la inmensa popularidad de JJ alrededor del país, lograron que la gente simplona asocie mentalmente a Julio Jaramillo con barcecopia. Y no solo eso, sino que además esta gente luzca orgullosamente su ignorancia a través de la publicación de notas de opinión como esta:
¡Ridículo! A Larenas, y a todos los incautos que siguen creyendo semejante patraña, seguramente les arde en el alma ver esta fotografía que recorre las redes sociales, en la que se ve al verdadero y único "Ruiseñor de América" vistiendo una gloriosa (y, si alguien la conserva, seguramente sería muy valiosa) camiseta del Club Sport Emelec, mientras juega fútbol.
Y aunque esta foto está en blanco y negro, los colores azul y plomo de la camiseta los pone la entrevista hecha por la página web oficial del Club Sport Emelec al nieto de JJ, Cristian Jaramillo, en la que resaltan frases muy interesantes y esclarecedoras, como estas:
“Siempre recalco en cualquier entrevista que doy que es un orgullo para mí pertenecer a la familia Jaramillo, soy la tercera generación, mi abuelo, mi padre (Julio Francisco), primer hijo de J.J, y ahora su nieto haciendo la música del Ruiseñor de América y portando los colores del equipo de sus amores que es Emelec, mi abuelo emelecista, mi padre emelecista, yo emelecista, mi hijo emelecista”
“Mi abuelito (J.J.) era de aquellos que llegaba de sus giras, se sentaba en el sofá, alzaba la mirada hacia arriba y decía: “¡Qué cansado estoy!”… Prendía la televisión y si por cosas de la vida estaban dando algún reportaje de Emelec o algún partido de Emelec, mi abuelito se quedaba ahí. No había cosa que le emocionara más, ni siquiera el alcohol (entre risas) y creo que así le nació el amor para ser emelecista”.
“Cuando vino de Uruguay, en el ‘67 (...) iban al estadio y mi abuelo se tomaba una jarra cervecera y gritaba los goles del Emelec, eso es lo que le encantaba cuando llegaba al Ecuador. Y lo primero que preguntaba era: ¿Cómo está mi mama y como está el Emelec en la tabla de posiciones?… es lo primero que preguntaba”.
“Para orgullo nuestro es azul mi abuelo, toda su vida fue azul”
Con estas evidencias, es mas fácil que tú, barcelonista simplón y envidioso, hagas una sencilla asociación mental: Julio Jaramillo + camiseta de Emelec + pasión y orgullo azul y plomo = ¡JULIO JARAMILLO ERA HINCHA DE EMELEC! No de barcecopia; ¡DE EMELEC!
Por eso la hinchada azul lo homenajea hoy y lo recuerda siempre. Lo hace cada vez que escucha, en cualquier lugar del mundo, las dulces melodías de la guitarra y el requinto, acompañadas por la voz del artista que puso el nombre del Ecuador en lo más alto del ámbito musical, como ningún otro ha podido hasta ahora.
Por mi parte, yo prefiero homenajear al gran 'JJ' de una manera diferente: contribuyendo a combatir la ignorancia de aquellos que afirman, muy sueltos de lengua, que Julio Jaramillo era hincha de barcecopia. ¡Tremenda calumnia!
Este ridículo mito urbano, que atenta contra el buen recuerdo que Ecuador tiene de él, seguramente fue originado en la poesía que el periodista guayaquileño Fernando Artieda (+) dedicó al 'Ruiseñor' tras su muerte. En ella, Artieda relata con emoción, picardía y un lenguaje muy propio del Guayaquil de siempre, la forma en la que la gente y la ciudad vivieron la muerte de JJ, y lo acompañaron en sus legendarios funerales.
Y es precisamente allí en donde surge la mala interpretación que induce al error a aquellos que, en lugar de investigar, prefieren repetir como loros lo que creen haber escuchado o entendido. A Artieda, recordado como hincha de farselona, seguramente no se le ocurrió nada mejor que decir al momento de narrar: "(...)un borrachito, con una botella de trago en la mano temblorosa, decía: 'ahora solo nos queda barcelona'(...)". Esta sencilla pero fictícia frase, mas la inmensa popularidad de JJ alrededor del país, lograron que la gente simplona asocie mentalmente a Julio Jaramillo con barcecopia. Y no solo eso, sino que además esta gente luzca orgullosamente su ignorancia a través de la publicación de notas de opinión como esta:
¡Ridículo! A Larenas, y a todos los incautos que siguen creyendo semejante patraña, seguramente les arde en el alma ver esta fotografía que recorre las redes sociales, en la que se ve al verdadero y único "Ruiseñor de América" vistiendo una gloriosa (y, si alguien la conserva, seguramente sería muy valiosa) camiseta del Club Sport Emelec, mientras juega fútbol.
Y aunque esta foto está en blanco y negro, los colores azul y plomo de la camiseta los pone la entrevista hecha por la página web oficial del Club Sport Emelec al nieto de JJ, Cristian Jaramillo, en la que resaltan frases muy interesantes y esclarecedoras, como estas:
“Siempre recalco en cualquier entrevista que doy que es un orgullo para mí pertenecer a la familia Jaramillo, soy la tercera generación, mi abuelo, mi padre (Julio Francisco), primer hijo de J.J, y ahora su nieto haciendo la música del Ruiseñor de América y portando los colores del equipo de sus amores que es Emelec, mi abuelo emelecista, mi padre emelecista, yo emelecista, mi hijo emelecista”
“Mi abuelito (J.J.) era de aquellos que llegaba de sus giras, se sentaba en el sofá, alzaba la mirada hacia arriba y decía: “¡Qué cansado estoy!”… Prendía la televisión y si por cosas de la vida estaban dando algún reportaje de Emelec o algún partido de Emelec, mi abuelito se quedaba ahí. No había cosa que le emocionara más, ni siquiera el alcohol (entre risas) y creo que así le nació el amor para ser emelecista”.
“Cuando vino de Uruguay, en el ‘67 (...) iban al estadio y mi abuelo se tomaba una jarra cervecera y gritaba los goles del Emelec, eso es lo que le encantaba cuando llegaba al Ecuador. Y lo primero que preguntaba era: ¿Cómo está mi mama y como está el Emelec en la tabla de posiciones?… es lo primero que preguntaba”.
“Para orgullo nuestro es azul mi abuelo, toda su vida fue azul”
Con estas evidencias, es mas fácil que tú, barcelonista simplón y envidioso, hagas una sencilla asociación mental: Julio Jaramillo + camiseta de Emelec + pasión y orgullo azul y plomo = ¡JULIO JARAMILLO ERA HINCHA DE EMELEC! No de barcecopia; ¡DE EMELEC!
Por eso la hinchada azul lo homenajea hoy y lo recuerda siempre. Lo hace cada vez que escucha, en cualquier lugar del mundo, las dulces melodías de la guitarra y el requinto, acompañadas por la voz del artista que puso el nombre del Ecuador en lo más alto del ámbito musical, como ningún otro ha podido hasta ahora.
