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lunes, febrero 09, 2015
Ellos forjaron su idolatría en el Capwell
Publicado a las 1:31:00 p. m. por webmaster
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Recorrieron la calle San Martín como en su época de gloria. El paso de los años hizo más lento su caminar, pero en sus memorias atesoran las jornadas vividas en el legendario estadio Capwell, aquel donde hace pocos días se iniciaron los trabajos de remodelación y al que no los dejaron ingresar "por orden superior".
Enrique Raymondi (77 años), Karol Farah (83) y Jorge Delgado (83) no quisieron perderse la histórica jornada. Los dos primeros jugaron en Emelec, mientras que el tercero defendió la portería de barcelona, pero en el césped de la 'Caldera' forjaron su idolatría y una amistad verdadera.
Enrique Raymondi (77 años), Karol Farah (83) y Jorge Delgado (83) no quisieron perderse la histórica jornada. Los dos primeros jugaron en Emelec, mientras que el tercero defendió la portería de barcelona, pero en el césped de la 'Caldera' forjaron su idolatría y una amistad verdadera.
"Por aquí (la tribuna San Martín) entrábamos nosotros. Del lado de la Pío Montúfar había habitaciones para los extranjeros. El mismo Fernando Paternoster se hospedó aquí", recuerda Raymondi.
Delgado jugó su primer Clásico en el año 1949. No recuerda el marcador, pero sí destaca que en aquel tiempo barcelona prácticamente "jugaba de local" en el estadio de su rival. "Nosotros teníamos más hinchada, pero debo reconocer que la de Emelec ha crecido mucho en los últimos años e hizo de este escenario un verdadero fortín".
Farah destaca el "ambiente único" que se vive en el Capwell. "Hay menos de dos metros de distancia entre la cancha y las gradas. Sientes al hincha casi a tu lado", expresó.
El sonido del combo derrumbando las paredes sabe a nostalgia para ellos. Con la caída de la tribuna San Martín se va parte de su juventud. Los tres se retiraron esperando ser testigos de la reapertura.
Delgado jugó su primer Clásico en el año 1949. No recuerda el marcador, pero sí destaca que en aquel tiempo barcelona prácticamente "jugaba de local" en el estadio de su rival. "Nosotros teníamos más hinchada, pero debo reconocer que la de Emelec ha crecido mucho en los últimos años e hizo de este escenario un verdadero fortín".
Farah destaca el "ambiente único" que se vive en el Capwell. "Hay menos de dos metros de distancia entre la cancha y las gradas. Sientes al hincha casi a tu lado", expresó.
El sonido del combo derrumbando las paredes sabe a nostalgia para ellos. Con la caída de la tribuna San Martín se va parte de su juventud. Los tres se retiraron esperando ser testigos de la reapertura.
Fuente: Expreso
