El cordobés aprovechó un rebote y fusiló al portero Marcelo Elizaga a los 41 minutos del primer tiempo para decretar el 1-0. Pero en ese momento, en vez de gritarlo a todo pulmón, Ludueña juntó sus manos como haciendo una plegaria y le hizo una venia a la Boca del Pozo, que le devolvió el gesto de caballerosidad aplaudiéndolo.

“Me sorprendí de la reacción que tuvo la gente. La hinchada de Emelec siempre me trató muy bien cuando jugué acá. Y, como lo había dicho en esta vuelta mía, si me tocaba hacer un gol no lo iba a celebrar, por respeto y el cariño que le tengo al club”.

Al preguntársele qué sintió al volver a pisar el gramado del Capwell, el ex River responde que “orgullo”.

“Muchos recuerdos pasaron por mi mente. Creo que los 6 meses que pasé acá fueron muy lindos, más allá de que no se logró el objetivo (entrar a liguilla). La verdad es que el haber vuelto al Capwell me llenó de orgullo”, afirma el delantero de 23 años, mientras revisa un mensaje de texto en el celular del coordinador de Emelec, Vicente Ricaurte. Se trata de un mensaje de un hincha, que le daba la bienvenida.

El argentino destaca que lo más fuerte del ‘Ballet’ fue la actuación de su nueva adquisición, David Quiroz, y los desbordes de Carlos Quiñónez y Aguirre.

“Es un equipo ordenado, tiene buenos jugadores, creo que la llegada de Quiroz le va dar mucho volumen de juego en el medio campo, por las bandas tiene las salidas de Carlos (Quiñónez) y de (José) Aguirre, que son importantes cuando se suman al ataque. Creo que Emelec ha formado un buen grupo y le van a salir bien las cosas".

Asimismo, el delantero argentino, a quien Emelec le adeuda 15.000 dólares, por concepto de mensualidades atrasadas, asegura que no piensa demandar al club, como lo hizo ante la FIFA, Livio Prieto, al que le deben 6 meses, porque él tiene un acuerdo firmado con el club, que espera que se respete.