domingo, julio 03, 2011
El Comercio presenta: un momento de reflexión
Publicado a las 2:02:00 p. m. por webmaster
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Cuando los hinchas de Emelec escuchamos el nombre El Comercio, lo primero que se nos viene a la mente son términos como: "regionalismo", "desprecio", "liguismo", "ceguera", "ignorancia", "anti-emelecismo", entre otros.
Y es que, con el paso de los años, los medios de comunicación de este grupo empresarial se han ganado a pulso cada uno de estos calificativos, gracias a sus constantes ataques hacia nuestro equipo, con el cada vez mas evidente objetivo de abrirle, por la fuerza, un espacio a ligay del norte de Quito en la historia de nuestro fútbol.
Por eso, en medio de tanta devoción por ligay, resulta extraño encontrar algún comentario equilibrado, imparcial o coherente. Más aún, cuando se trata de poner en evidencia las obvias inferioridades que las 'azucenas', que enaltecen aún más a Emelec y a su hinchada:
Y es que, con el paso de los años, los medios de comunicación de este grupo empresarial se han ganado a pulso cada uno de estos calificativos, gracias a sus constantes ataques hacia nuestro equipo, con el cada vez mas evidente objetivo de abrirle, por la fuerza, un espacio a ligay del norte de Quito en la historia de nuestro fútbol.
Por eso, en medio de tanta devoción por ligay, resulta extraño encontrar algún comentario equilibrado, imparcial o coherente. Más aún, cuando se trata de poner en evidencia las obvias inferioridades que las 'azucenas', que enaltecen aún más a Emelec y a su hinchada:
Estoy seguro que el autor de ese artículo sintió que moría un poco cuando lo escribió. Y es que nadie puede negar la ínfima calidad de hinchada que tiene ligay: cobardes, resultadistas, "barrabravas de escritorio", noveleros y, principalmente, pocos, muy pocos.
Pero esto no termina ahí. Si el anterior artículo fue sorprendente, el corto momento de lucidez que tuvo Últimas Noticias (vespertino del mismo grupo de medios, de circulación exclusiva en la ciudad de Quito) lo es aún más. Al recordar la devoción con la que inventan idioteces para complacer a los ligays, resulta desconcertante leer algo como esto:
Pero esto no termina ahí. Si el anterior artículo fue sorprendente, el corto momento de lucidez que tuvo Últimas Noticias (vespertino del mismo grupo de medios, de circulación exclusiva en la ciudad de Quito) lo es aún más. Al recordar la devoción con la que inventan idioteces para complacer a los ligays, resulta desconcertante leer algo como esto:
El autor de este artículo seguramente fue despedido tras infringir la norma empresarial de "favorecer a liga, perjudicar a Emelec". O al menos, recibió unos cuantos azotes de parte de la mismísima Guadalupe Mantilla. Pero, ¿qué podía hacer el autor, si hasta el mismo Rodrigo Paz ha declarado su inconformidad con la novelería de los hinchas ligays, que solo aparecen por el estadio cuando el equipo va bien, y si no, se dedican a insultar y agredir a jugadores, técnicos y dirigentes?
Con tanto espejismo irrepetible, solo nos queda algo en claro: Emelec y su hinchada fueron mejores que los demás. Tal fue su superioridad que nadie, ni los liguistas más enfermos, se atrevieron a intentar siquiera ponerla en duda. Eso es lo que logra un verdadero grande.
Con tanto espejismo irrepetible, solo nos queda algo en claro: Emelec y su hinchada fueron mejores que los demás. Tal fue su superioridad que nadie, ni los liguistas más enfermos, se atrevieron a intentar siquiera ponerla en duda. Eso es lo que logra un verdadero grande.