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Con un gol apenas a los 5 minutos, Botafogo se metió la clasificación a los cuartos de final en el bolsillo. Emelec supo darle la vuelta al resultado, pero sólo le alcanzó para despedirse del certamen con una victoria.
La noche de este miércoles, por el partido de vuelta de una de las llaves de los Octavos de Final de la Copa Sudamericana, Emelec recibió a Botafogo. A pesar de que el equipo local se impuso 2x1, fueron los brasileños quienes avanzan a la siguiente ronda con un marcador global de 3x2. En la próxima fase, el conjunto de la estrella solitaria se las verá con el triunfador de la llave entre Goiás y Cerro Porteño.
Como era de esperarse, el equipo eléctrico saltó a proponer el juego, pero, apenas a los 5 minutos, Botafogo sorprendió y prácticamente liquidó el pleito. Victor Simões apareció por el costado derecho para tomar un mal rechazo, ganó la raya de fondo y levantó un centro para que André Lima se adelantara a todos y lo desviara al fondo con un certero cabezazo.
Como producto de este gol, los azules pasaron a tener la obligación de anotar 4 veces para llevarse la clasificación. Sin embargo, no bajaron los brazos, empezaron a presionar por el descuento y, a los 13, estuvieron a punto de concretarlo: En un tiro libre desde la izquierda, Joao Rojas elevó un centro al área y Mariano Mina sacó un cabezazo que se estrelló en el horizontal; Peirone tomó el rebote, pero no pudo pegarle.
Poco a poco, los cariocas empezaron a moverse mejor en el campo de juego y, sin hacer mucho, administraban bien la ventaja. Pasada la media hora, los locales recién volvieron a insinuarse con peligro. Primero, a los 31, Rojas desbordó por el carril derecho, ganó el fondo y elevó un centro que Pablo Pérez conectó con una chilena que se fue por arriba del horizontal. 4 minutos después, a la altura del punto penal, José Luis Quiñónez sacó un potente disparo que parecía que se iba a la portería, pero que se desvió en uno de sus mismos compañeros.
En la etapa complementaria, Emelec saltó con todo a seguir buscando y, a los 52, ya alcanzó el merecido empate con un golazo de jugada colectiva terminada por Carlos Quiñónez. Luego de él mismo haber iniciado la acción, el lateral corrió al área para recibir un pase de taco de Franco Mendoza y mandar el balón a las redes con un potente disparo.
Los eléctricos se motivaron y no tardaron en poner la segunda. Apenas 5 después, en un tiro de esquina elevado por Raponi, José Luis Quiñónez madrugó a todos sus rivales y sacó un fuerte disparo de cabeza que se fue al fondo.
Al quedar a sólo dos anotaciones de la hazaña, los dueños de casa se animaron aún más y siguieron presionando con mayor ímpetu. Incluso, el técnico Gabriel Perrone se animó a ingresar al delantero Agustín Delgado en lugar del volante de marca José Quiñónez. Sin embargo, a pesar de que lograron llegar hasta el área contraria en algunas ocasiones, les faltó precisión en los últimos metros para aumentar la ventaja.
Por otro lado, la visita hizo los cambios oportunos para sostener el marcador y hasta estuvo cerca de poner el empate a los 79 cuando André Lima se animó a pegarle desde el borde del área y su disparo se fue apenas por arriba del horizontal. Poco después, Rodrigo Dantas también se tuvo fe y generó un buen susto con un tiro que se fue muy cerca.
La noche de este miércoles, por el partido de vuelta de una de las llaves de los Octavos de Final de la Copa Sudamericana, Emelec recibió a Botafogo. A pesar de que el equipo local se impuso 2x1, fueron los brasileños quienes avanzan a la siguiente ronda con un marcador global de 3x2. En la próxima fase, el conjunto de la estrella solitaria se las verá con el triunfador de la llave entre Goiás y Cerro Porteño.
Como era de esperarse, el equipo eléctrico saltó a proponer el juego, pero, apenas a los 5 minutos, Botafogo sorprendió y prácticamente liquidó el pleito. Victor Simões apareció por el costado derecho para tomar un mal rechazo, ganó la raya de fondo y levantó un centro para que André Lima se adelantara a todos y lo desviara al fondo con un certero cabezazo.
Como producto de este gol, los azules pasaron a tener la obligación de anotar 4 veces para llevarse la clasificación. Sin embargo, no bajaron los brazos, empezaron a presionar por el descuento y, a los 13, estuvieron a punto de concretarlo: En un tiro libre desde la izquierda, Joao Rojas elevó un centro al área y Mariano Mina sacó un cabezazo que se estrelló en el horizontal; Peirone tomó el rebote, pero no pudo pegarle.
Poco a poco, los cariocas empezaron a moverse mejor en el campo de juego y, sin hacer mucho, administraban bien la ventaja. Pasada la media hora, los locales recién volvieron a insinuarse con peligro. Primero, a los 31, Rojas desbordó por el carril derecho, ganó el fondo y elevó un centro que Pablo Pérez conectó con una chilena que se fue por arriba del horizontal. 4 minutos después, a la altura del punto penal, José Luis Quiñónez sacó un potente disparo que parecía que se iba a la portería, pero que se desvió en uno de sus mismos compañeros.
En la etapa complementaria, Emelec saltó con todo a seguir buscando y, a los 52, ya alcanzó el merecido empate con un golazo de jugada colectiva terminada por Carlos Quiñónez. Luego de él mismo haber iniciado la acción, el lateral corrió al área para recibir un pase de taco de Franco Mendoza y mandar el balón a las redes con un potente disparo.
Los eléctricos se motivaron y no tardaron en poner la segunda. Apenas 5 después, en un tiro de esquina elevado por Raponi, José Luis Quiñónez madrugó a todos sus rivales y sacó un fuerte disparo de cabeza que se fue al fondo.
Al quedar a sólo dos anotaciones de la hazaña, los dueños de casa se animaron aún más y siguieron presionando con mayor ímpetu. Incluso, el técnico Gabriel Perrone se animó a ingresar al delantero Agustín Delgado en lugar del volante de marca José Quiñónez. Sin embargo, a pesar de que lograron llegar hasta el área contraria en algunas ocasiones, les faltó precisión en los últimos metros para aumentar la ventaja.
Por otro lado, la visita hizo los cambios oportunos para sostener el marcador y hasta estuvo cerca de poner el empate a los 79 cuando André Lima se animó a pegarle desde el borde del área y su disparo se fue apenas por arriba del horizontal. Poco después, Rodrigo Dantas también se tuvo fe y generó un buen susto con un tiro que se fue muy cerca.
Fuente: FutbolEcuador
Ese es el comentario de un liguista que dice que hubiese preferido ser goleado por barceloca ya que no es clásico. Aunque de todas maneras esta equivocado diciendo que ligay-D.taxi es clásico, aunque es un partido regional y conste en la fecha de "clásicos", no es conciderado un verdadero clásico ya que como recalcamos según la FIFA y FootballDerbies en Ecuador solo hay un clásico, y es el del Astillero, que lo disputan 
